miércoles, 20 de mayo de 2015

... Y DOS HUEVOS DUROS

Ha llegado la hora de los ciudadanos, en la que tomamos voz y con nuestro voto podemos mantener en los gobiernos municipales o regionales, a quienes han estado gobernando los últimos cuatro años, o decidir que es el momento de que se vayan a la oposición.
   Y en este tiempo de promesas, es preciso recordar qué dijeron y qué han hecho quienes se presentan de nuevo, y el trabajo llevado a cabo por quienes han estado en la oposición.
   Debemos leer los programas electorales de los distintos partidos políticos, leerlos y valorarlos, porque, en teoría, con esas promesas nos piden el voto para mejorar nuestras vidas.
   Hay que leerlos y estudiar sus propuestas, analizando si con ellas nos están ofreciendo acciones y medidas realizables y positivas, o se trata de simple palabrería que no conduce a ningún sitio.
   Porque todos nos van a ofrecer: “más empleo, acabar con el paro, bienestar social, calles limpias, cultura, juventud y deportes…” En una especie de subasta en la que los partidos intentarán añadir de su cosecha, como en la hilarante comedia de los Marx, “dos huevos duros” al desayuno electoral.
   Apartar la paja de los proyectos realizables, desechar las acciones que son cantos al Sol, y discernir si alguien miente para mantenerse o llegar al puesto de mando…, ese es el trabajo que nos espera a los ciudadanos, a fin de acudir el 24-M con nuestro voto decidido, diciéndoles a los actuales “quién no te conozca, que te compre”,  o a los aspirantes: “más vale lo malo conocido, que lo bueno por conocer”.  © JOSÉ GARCÍA GONZÁLEZ

domingo, 3 de mayo de 2015

LA LIBERTAD DE PRENSA

Tengo escrito que la libertad de prensa “es un logro de nuestros días que debemos proteger, aunque no es fácil en algunas zonas de la tierra, en donde los hombres mueren por opinar, o por contar al mundo la verdad de lo que ocurre. En muchos países hemos aprendido a vivir en libertad y a respetar y valorar el trabajo y el esfuerzo de la prensa, porque no hay libertad real, democracia auténtica, sin una verdadera prensa libre”.
Y aún en democracia es difícil escuchar, ver o leer, noticias distintas a las de los gabinetes oficiales, servidores de los poderes públicos, que imponen argumentarios propagandísticos totalmente faltos de autocrítica.
Resulta muy complicado escuchar o leer opiniones diferentes a las del poder, político o económico, que intenta impedir que exista una prensa totalmente libre, partidario como es, del autobombo y de periodistas a sueldo.
Por eso no podemos hablar de periódicos, de radios, de televisiones libres, cuando el sistema oprime a periodistas mal pagados, que se autocensuran para no molestar a sus jefes y, por el contrario, premia a los periodistas ‘leales’ para que difundan la propaganda y la mentira.
Pero hay parcelas de libertad, de prensa libre, que alumbran la oscuridad política y económica y enseñan el camino, plagado de dificultades, a una sociedad que necesita estar informada para ser verdaderamente libre.
Y en el día de la LIBERTAD DE PRENSA, alegrémonos por esas parcelas informativas, por esa siembra de verdad, que no sólo amenaza la corrupción política y económica, sino que también anuncia nuevos cultivos de información al servicio de la sociedad y no al de unos pocos.   

3/5/2015 © José García